Tal vez no sea este el mejor, preferiría otras circunstancias, otra salud, otras compañías... Es soñar, no pisar el suelo. El valor de mi vida no es lo que vivo sino cómo lo vivo, si lo lleno de ganas, de amor a Dios y a los demás. (Padre Manolo Morales o.s.a.)
El momento presente debe ser la torre desde donde miramos la vida. Si estamos fijos en el presente, podemos reflexionar sobre el pasado y proyectar el futuro sin apegos ni ilusiones, porque somos conscientes de que la vida está en el ahora.
Concentrar fuerza, mente y corazón en el momento presente nos capacita para la eternidad, porque el momento presente es nada más que un fragmento de la eternidad que construimos con nuestras propias manos.
Para amar sólo tenemos el hoy, para vivir sólo tenemos el momento que pasa veloz, para decir Sí a la vida sólo tenemos el ahora.
Si para amar y vivir sólo tenemos el día de hoy, amemos y vivamos fijos en el momento presente. Así, un día viviremos el Eterno Hoy.
Abrazos,
Apolonio Carvalho Nascimento