Solo en la verdad está nuestro bien y nuestra libertad: en el proyecto de Dios sobre todos y sobre cada uno. Pero se requiere valentía y humildad para no esconderla, tergiversarla, falsearla... La mentira es vicio de débiles. (Padre Manolo Morales o.s.a.)
A veces puede parecer que la mentira domina el mundo. La mentira nunca ha logrado vencer a la verdad. Ella gana adeptos, defensores, pero al final prevalece la verdad.
Dios es Amor, Verdad y Libertad.
No necesitamos confrontar la mentira con palabras, sino con la Palabra de Dios hecha vida. Es decir, con el testimonio de la Palabra vivida.
La verdad, que es amor, nos libera del pecado, de las garras del mal. Esta es nuestra fuerza.
La mayor libertad que podemos experimentar no es tanto el poder hacer todo lo que deseamos, sino la libertad de nuestros propios condicionamientos, de nuestros vicios, de nuestras debilidades. Y sólo el amor es capaz de hacernos conocer la verdad, que nos hace libres.
El amor que es Camino, Verdad y Vida.
“Conocerán la verdad y la verdad los hará libres”. (Jn. 8,32)
Abrazos,
Apolonio Carvalho Nascimento