Solo la humildad convierte nuestras cualidades en amor y servicio: damos gratis lo que hemos recibido gratis. Vemos, en cambio, a qué desastres conduce imponer los propios dones con soberbia. En personas y pueblos. (Padre Manolo Morales o.s.a.)
De la misma manera sucede al compartir nuestros talentos. No hay nadie que carezca totalmente de talentos. No sólo de talentos artísticos, sino de todo tipo de talentos: la capacidad de hacer trabajos humildes de servicio a los demás, de organizar actividades en la comunidad; así como ofrecer nuestras habilidades en todos los campos.
Lo importante es que entendamos el sentido del compartir como una comunión, donde todos tienen algo que ofrecer y algo que recibir.
Compartir es nuestra mayor riqueza, porque a quien da, le será dado; quien pide, recibe; quien busca, encuentra; para quien llama, las puertas se abren. (Cf. 6,38 y 11,5-13)
Abrazos,
Apolonio Carvalho Nascimento