Con más cercanía y corazón en nuestras relaciones haremos realidad eso que le gusta tanto al papa Francisco (que hoy viaja a Kazajistán): "¿dónde hay una nación tan grande que tenga unos dioses tan cercanos como el Señor, nuestro Dios?" (Padre Manolo Morales o.s.a.)
Cuando alguien nos pide ayuda o cuando notamos que alguien necesita de nuestra ayuda, debemos ir a su encuentro con el propósito de vivir junto a él, la fe, la esperanza y el amor, pues esas virtudes tienen la creatividad de Dios.
El amor nos ayuda a pensar solamente en el bien del otro, superando obstáculos, venciendo las dificultades.
La fe genera el milagro de la perseverancia, de creer en la providencia de Dios y descubrir el poder de la oración.
La esperanza trae al presente las metas futuras, anticipa la felicidad de la llegada al destino final con la confianza de que estamos en el camino más seguro.
Cuando estamos cerca de cada prójimo con la intención de amar, la creatividad del Espíritu Santo nos acompaña.
Abrazos,
Apolonio Carvalho Nascimento