"No canta el pajarillo porque es feliz; es feliz porque canta". Cuando, sin esperar a "tener ganas" y sentirse motivados, el corazón "canta", es decir, ama, se pone en marcha, actúa más allá de sus gustos, eso libera y hace feliz. Basta probar. (Padre Manolo Morales o.s.a.)
El apego excesivo a las cosas materiales, a los lugares, a las personas, a mis ideas, a todo lo que considero “mío”.
Cuando salgo de mí para ir al encuentro del otro, entiendo que el amor es la clave de la verdadera libertad.
Puedo poner las cosas que tengo al servicio de los hermanos y hermanas; el mejor lugar es donde estoy en el momento presente; mis ideas yo las doy como propuestas y no como imposiciones; puedo amar a todas las personas sin hacer distinciones.
Soy libre cuando consciente del libre albedrío, tomo la decisión de amar siempre.
Abrazos,
Apolonio Carvalho Nascimento