Por mucho que nos escandalice el espectáculo de discordia que ofrece el mundo, el cielo sigue pidiendo a gritos el amor y la reconciliación para que Dios pueda regir los pueblos con justicia. Dondequiera que estemos, ¡lo primero la concordia! (Padre Manolo Morales o.s.a.)
En la oración de Francisco de Asís se encuentra la frase “Donde haya discordia, lleve yo la unión”. Creo que es este el significado que podemos dar a la “consigna” de hoy.
El mundo en que vivimos es un mundo de conflictos. Cómo puedo contribuir para que haya concordia? Sembrando paz en los ambientes donde vivo: en la familia, en el trabajo, en la calle, entre amigos, en la comunidad.
Debo sumergirme en mi interior y buscar mi unión con Dios. Es a partir de esto que consigo generar la unidad entre todos, asumiendo todas las divisiones como algo que me toca directamente.
Abraços,
Apolonio Carvalho Nascimento