“Preparémonos para dejar de lado todo lo que pueda bloquear la presencia de Dios en nuestra vida. Preguntémonos cada noche si Dios ha estado en el primer lugar de nuestra vida. Si es así, habremos ganado el gozo, la paz y la amor propio de su reino, así como la luz y la fuerza necesarias para contribuir a la edificación de un mundo nuevo aquí en la tierra".Chiara Lubich
Nos gustaría que nuestro viaje de la vida fuera lo más cómodo posible y que Dios lo facilitara incluso con algún milagrito. Pero ¿sé yo el camino? ¿Conozco la patria adonde me dirijo? ¡Ay la fe, la fe! ¡Qué grande don! (Padre Manolo Morales o.s.a.)
La conciencia de vivir en la presencia de Dios cambia nuestra mentalidad y nuestra forma de actuar, porque podemos confrontarnos con su voluntad en todo momento.
Este confrontarse es algo interior, es un examen de conciencia que quizá ni siquiera la perciban las personas que nos rodean. Pero nuestra acción se vuelve testimonio de esta relación íntima y constante con su voluntad.
Son muchos los caminos que nos llevan a Dios, pero todos ellos pasan por la práctica del amor al hermano.
Que la conciencia de su presencia en nosotros, entre nosotros y en las circunstancias, nos conduzca por los caminos de la vida.
Abrazos,
Apolonio Carvalho Nascimento