"Saben que Jesús está presente, por ejemplo, en los sacramentos. Por ejemplo, se hace verdaderamente presente en la Eucaristía. Jesús está presente también allí donde se vive el amor recíproco. Él dijo: "Donde dos o tres están reunidos en mi nombre" (y esto es posible gracias al amor recíproco), "yo estoy allí en medio de ellos". Así, en una comunidad donde la vida está profundamente arraigada en el amor recíproco, Él puede seguir estando activamente presente."
Chiara Lubich
Claro que no siempre vuelve, ni debemos pretenderlo, aunque lo suyo es que vuelva y sea recíproco el amor que damos. Dios, que es el Amor, no falla; siempre estará detrás devolviéndonos la plenitud y el gozo de haber amado. (Padre Manolo Morales o.s.a.).
Somos y seremos siempre muy diferentes unos de otros. Y demos gracias a Dios por esto, porque es una gran riqueza.
Pero a veces estas diferencias son como aristas que nos hieren. Y cuanto más cerca estamos de la relación, más puede suceder esto.
Sólo hay una manera de limar estas asperezas, para que seamos como rodillos bien lubricados, para que el funcionamiento de las relaciones sea sano y sin fricciones dañinas. Es la vivencia del amor mutuo.
Ella favorece la relación, elimina fricciones y hace que las diferencias se conviertan en riqueza que une y no en barrera que divide.
Abrazos,
Apolonio Carvalho Nascimento