Es una de las experiencias más saludables que tal vez hemos hecho: sentirnos escuchados hasta el fondo con gusto, con satisfacción. ¿No será también una de las maneras más elocuentes de mostrar a este mundo el Amor de Dios? (Padre Manolo Morales o.s.a.)
El que habla debe sentirse acogido en su libertad de expresión.
Incluso cuando tengo la convicción de tener la verdad, debo callar por amor, para que el otro tenga espacio y pueda ser él mismo.
Cuándo esa actitud se vuelve recíproca, entonces tenemos el verdadero diálogo.
Sin embargo, debo tomar la iniciativa, porque ama siempre quién ama primero.
Abrazos,
Apolonio Carvalho Nascimento