'Amad a vuestros enemigos, haced el bien a los que os odian, bendecid a los que os maldicen, orad por los que os insultan'. ¿Lo ves? Jesús quiere que venzamos el mal con el bien. Quiere un amor expresado en gestos concretos... El hecho es que quiere que nos enseñemos a modelar nuestra conducta a la de Dios, su Padre, que 'hace salir su sol sobre malos y buenos, y hace llover sobre los justos y los injustos'
Chiara Lubich
"Se levantó y se puso en camino de prisa". Lo viven hoy en Lisboa multitud de jóvenes. María, embarazada, lleva en su vientre a Dios -el Amor en carne-, y va en ayuda de la prima Isabel: a fregar, limpiar, hacer el bien. (Padre Manolo Morales o.s.a.)
Vivir esta frase es un gran desafío, porque tenemos que practicar el estilo de vida enseñado por Jesús; es decir, el amor puro, desinteresado, irrestricto, que llega incluso al enemigo.
Para entender mejor cómo podemos vivirla, debemos reflexionar sobre algunos puntos importantes, tanto para quien es cristiano como para quien simplemente quiere tener una forma de vida humanizada, y no sólo civilizada.
Todos sin excepción, fuimos creados a semejanza de Dios.
La justicia de Dios se basa en el amor; ella da los mismos derechos y dignidad a todos sus hijos. Él hace nacer el sol y caer la lluvia sobre los malos y los buenos. (Cf. Mt. 5,45)
Dios hace el bien todo el tiempo. Y nosotros, a su semejanza, debemos hacer lo mismo.
Abrazos,
Apolonio Carvalho Nascimento