Un amor que se perfecciona y fortalece venciendo nuestra mayor debilidad: el miedo y la poca fe. Si en esa lucha nos acompañamos y nos dejarnos acompañar, el ánimo se reparte y el amor nos hace valientes y maduros. (Padre Manolo Morales o.s.a.)
Debemos encarar cada obstáculo como un desafío a ser superado. Si nos convencemos de que debemos amar siempre, en cualquier situación, veremos desmoronarse barreras, y abrirse un nuevo horizonte frente a nosotros.
Nuestro aliado es Dios, para quien nada es imposible. Por eso, en los momentos más difíciles, debemos recordar esta alianza, debemos contar con su ayuda. De hecho, debemos recordar siempre.
Un obstáculo puede impedirnos hacer muchas cosas, pero no puede impedirnos amar. El amor, a su vez, es un trampolín, es solución, es avanzar siempre adelante.
Abrazos,
Apolonio Carvalho Nascimento