Tal vez no dependa de nosotros custodiar eficazmente la tierra, el agua, el aire, pero sí defendernos y defender a los demás de lo que puede dañarnos, incluso destruirnos: por ejemplo, el tedio, la tristeza, la fatiga de vivir...Somos creación de Dios. (Padre Manolo Morales o.s.a.)
Este tema es insistente porque es algo urgente y sobre el cual mucha gente aún no tiene plena consciencia de su importancia.
En todas partes del mundo estamos viendo las graves consecuencias de la falta de cuidado con la naturaleza y las múltiples acciones depredadoras del ser humano.
Salvaguardar la Creación que Dios nos confió, es nuestra salvación como seres humanos, para mantener la armonía del planeta.
Tener una relación sostenible con el medio ambiente de manera constante y efectiva, requiere amor a uno mismo, amor al prójimo, amor al planeta como nuestra casa común y, sobre todo, amor a Dios Creador.
Abrazos,
Apolonio Carvalho Nascimento