¡Jamás sembrar entre nosotros pesimismos estériles! "Dios es bueno": necesita corazones "ensanchados" capaces de transmitir con entusiasmo su Sabiduría a las generaciones que nos siguen: ¡Tenemos un futuro, y es Él! (Padre Manolo Morales o.s.a.)
Sólo quien mantiene la caridad mantiene también la esperanza. En otras palabras: quien sigue amando frente a la adversidad vive con esperanza.
Nuestra unión con Dios a través de la oración fortalece la fe, la esperanza y el amor.
Cuando tenemos fe en la protección permanente de Dios, las adversidades no nos desalientan a recomenzar. La esperanza permanece viva en nuestros corazones, porque adquirimos la convicción de que para Dios nada es imposible.
El amor mutuo vivido intensa y continuamente nos hace experimentar la vida del Cielo aquí en la tierra. Esto se llama esperanza de vida eterna.
Permanezcamos en el amor para mantener viva la esperanza.
Abrazos,
Apolonio Carvalho Nascimento