Que no se nos vaya la vida sin aprovecharla como el don de Dios que es. Cada momento, cada circunstancia, sea la que sea, todo, nos trae una palabra suya de amor, una indicación, un aviso. Que no nos pille distraídos. El Amor pide amor. (P.M.)
Permanezco vigilante en el momento presente cuando hago el bien; cuando sirvo a mi prójimo; cuando tomo la iniciativa en el amor; cuando amo a todos.
Vigilar no puede ser una actitud pasiva sólo de no hacer el mal, es una actitud activa y creativa, porque cuando amo de verdad, me alejo del pecado.
Cuando practico una virtud, elimino uno o más vicios; cuando me pongo al servicio de los demás, elimino la comodidad, la soberbia, el orgullo: cuando amo y rezo por quien no me quiere, elimino el odio y el rencor.
Cuando amo, tengo el corazón vigilante y entiendo que la vida se resume en el momento presente, porque es amando ahora que construyo mi eternidad.
Abrazos,
Apolonio Carvalho Nascimento