La fe mueve montañas. Cuando alguien nos promete ayuda, ganamos confianza para realizar un proyecto audaz o para superar dificultades.
La fe es muy superior a las técnicas de autoayuda. Si bien es bueno tener pensamientos positivos, ellos no ayudan cuando el fracaso es inevitable. Cuando tenemos fe en la protección de Dios, el fracaso es solo circunstancial, no es algo determinante hasta el punto de impedirnos recomenzar.
La unión con Dios nos fortalece en todo. Estamos siempre listos para la lucha diaria, con la seguridad de la victoria.
Hoy, antes de cada actividad o ante cualquier dificultad, digamos con fe: “Recomenzar confiando en Dios”
Abrazos,
Apolonio Carvalho Nascimento
Recomenzar: es una palabra mágica, de higiene mental, que nos ayuda a dejar el pasado en manos de Dios. Vivir en Él mi presente es "andar en novedad de vida". Hago bien las cosas ahora mismo, con amor, y eternizo este momento. (P.M.)