Podemos multiplicar los actos de amor, haciendo solo cosas que promuevan el bien de todos.
Gestos simples del día a día, cosas rutinarias de nuestro trabajo, imprevistos, cambios repentinos de programa, imposibilidades, ocasiones favorables, momentos de oración. Todo puede servir como motivo para multiplicar los gestos de amor.
Un día, ante una situación inusual, en la que no sabía que actitud tomar, solo hice pequeños gestos de amor a la persona involucrada y una oración entregándola en las manos de Dios.
Poco después, un amigo se enfermó y tuve que atenderlo y medicarlo.
En poco tiempo las dos situaciones se resolvieron y quedó en mí la sensación de que lo más importante de todo, era multiplicar los actos de amor con el prójimo.
Si el bien se multiplica dentro de nosotros, también se multiplica a nuestro alrededor.
Abrazos,
Apolonio Carvalho Nascimento
Son esos gestos el fruto bueno del árbol bueno, "el oxígeno" benéfico de nuestras raíces y nuestra "planta ". Sembrados por el Amor, solo crecemos así, en el amor. Pero ¡qué pobrecito el amor que no se manifiesta! ¿Una higuera sin higos? (P.M.)