Sobre todo, cuando la cosa se pone difícil. La mirada fiel del Padre del cielo es siempre garantía de fuerza y de luz. Trabajar con Él, movernos, sufrir, construir con Él, es vivir en plenitud, satisfacer su corazón y el nuestro. (Padre Manolo Morales o.s.a.)
Vamos a reflexionar sobre dos maneras de decir un nuevo sí a la voluntad de Dios.
En primer lugar, en las cosas rutinarias del día a día, en nuestras obligaciones como profesionales, en las tareas domésticas. Aquí podemos utilizar la táctica que nos enseñó Chiara Lubich, fundadora de los Focolares. Decir un "Por ti, Jesús" antes de cualquiera de nuestras acciones.
Esta postura renueva nuestro sí a la voluntad de Dios.
Otra situación son los imprevistos de cualquier tipo: dificultades que surgen repentinamente, una enfermedad, la pérdida de un ser querido o cualquier otra pérdida. Aquí podemos utilizar la táctica usada por otra Chiara, la joven Chiara Luce Badano, que, ante su enfermedad incurable, repetía a cada momento: "Si tú lo quieres, Jesús, yo también lo quiero".
Con estas dos tácticas podremos decir siempre un nuevo sí a la voluntad de Dios.
Abrazos,
Apolonio Carvalho Nascimento