Siempre hay una ocasión donde podemos ser constructores de concordia: sembrar concordia entre todos, vivir por la unidad donde hay división, siendo un vínculo que establece la armonía entre todos.
Mostremos al mundo que es posible convivir con diferencias sin dividir, sin separarnos unos de otros.
Respetar las diferentes opiniones es ser constructor de concordia.
Saber escuchar al otro y valorarlo, es ser constructor de concordia.
Que nuestra presencia en todos los ambientes sea señal de unidad, concordia y paz.
Abrazos,
Apolonio Carvalho Nascimento
Parece que muchos lo desconocen, pero el demonio lo sabe: que la única ley que nos hace verdaderamente grandes es el mandamiento nuevo del amor. La Virgen Madre nos mantendrá firmes en esta lucha, propia de los hijos de Dios. (P.M.)