Para poder escuchar y ser fieles al Espíritu que orienta desde dentro; para conseguir que la vida sea una constante novedad. El camino será unas veces de rosas, otras, de espinas, pero serán siempre caminos de Dios, serenos, fecundos. (P.M.)
Hacer todos los días el propósito de mejorar, aunque sea la milésima vez que recomienzo.
Recomenzar en vivir bien cada momento presente. Dar un paso decisivo en la dirección correcta para realizar el designio del amor que Dios pensó para mí.
“Quien no avanza, se queda atrás” Si yo dejo pasar el tiempo, siempre tendré menos tiempo para recomenzar.
Hoy es el día en que puedo ser mejor, en que puedo amar más y vivir más.
Abrazos,
Apolonio Carvalho Nascimento