Su Palabra. Desde niños Dios la ha sembrado en nuestra mente y en nuestros corazones. Frente al ruido de tantas otras palabras, fuera y dentro de nosotros, vivir obedeciendo a Dios es lo que nos hace fuertes. Y todo cobra sentido. (P.M.)
Vivir la Palabra nos acerca a Dios. Y cuanto más cerca, más sentimos Su amor. La Palabra nos revela ese amor muy claramente.
Vivir la Palabra de Dios es una manera de demostrarle nuestro amor, sin embargo Él nos retribuye con el céntuplo.
Dios revela Su amor en la Palabra que vivimos. Por ejemplo: “El que me ama será amado por mi Padre, y yo lo amaré y me manifestaré a él” (Jn. 14,21)
La luz, la alegría, la paz, son frutos de vivir la Palabra y al mismo tiempo, son las manifestaciones del amor de Dios que se revela en nosotros.
Abrazos,
Apolonio Carvalho Nascimento