Será muchas veces ese perdón un arranque de la voluntad, impulsada y guiada por la fe. Así volaremos libres, y los sentimientos de la ofensa sufrida terminarán viniendo detrás. Que Dios sabe hacer justicia mejor que nosotros. (P.M.)
La fe nos hace actuar con valentía y nos hace atrevernos incluso a perdonar.
Con Dios nos atrevemos a creer contra toda esperanza, nos atrevemos a superar cualquier obstáculo, nos atrevemos a interceder en favor de los desesperados, nos atrevemos a alcanzar la santidad porque nuestro Dios es santo.
Con Dios tenemos la valentía de seguir hasta el final, de no detenernos ante las dificultades, la valentía de ir contra la corriente del mundo que quiere arrastrarnos, la valentía de ser testigos del amor a toda costa.
Soy valiente cuando amo a todos sin hacer distinciones; cuando amo en primer lugar sin esperar nada a cambio. Soy valiente cuando amo sabiendo perdonar.
Abrazos,
Apolonio Carvalho Nascimento